Un refrán andino dice "Lo que doy me lo doy y lo que no doy me lo quito", y el Padre Juan lo aplica afirmando convencido de que "la vida te termina devolviendo el 101% de lo que das". Es lo que está haciendo con la población desfavorecida de la región de Hualmay, a 150 kilómetros de Lima, donde viven unas 30.000 personas en casas de estera o ladrillo con muchas calles de tierra sin asfaltar. Digamos que, en general, donde la gente solo sobrevive.
Uno de los colectivos más marginados en la zona son los niños con discapacidad, por lo que entre los proyectos más importantes de la Misión, que ya es una realidad, es la construcción de un centro de rehabilitación para atenderlos.
Seguiremos hablando de ello ...
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